Biolcati pide, pero no tiene la receta para vivir sin retenciones

Por Francisco Balázs

Veo en los últimos días que hay como un movimiento de tablero, como que se está sacudiendo el tablero, una cosa que estaba totalmente quieta, fija, como empecinada…” “…lo del acuerdo con los exportadores tiene sus serios problemas, pero es un intento de algo.

También se ha hecho algo en lechería, todo bastante mediocre, pero hace un mes no había nada”, esto dijo Hugo Biolcati Magnasco, el tambero y presidente de la Sociedad Rural, el pasado viernes, horas antes de comenzar sus habituales vacaciones en pleno verano boreal que resultan impostergables para coincidir unos días con sus amigos que se encuentren en París, o con su hija en Londres.

En sintonía fina, casi distinguida, con Mauricio Macri y Francisco de Narváez que también para estas fechas se hacen sus asiduas escapaditas de descanso al Norte.Volviendo a las declaraciones de Biolcati Magnasco, tras dos tensas semanas de discursos y enfrentamiento con el Gobierno, y con una escasa o casi nula cobertura en los medios de las medidas anunciadas por el Ejecutivo para el sector lácteo y ganadero, y de ciertas señales de discutir retenciones en trigo y maíz, el presidente de la SRA ha decidido a través de sus declaraciones, aunque de manera mezquina, bajar la tensión durante su ausencia.

No habría que descartar que así como a principios de año se reveló que Biolcati mantenía reuniones con Julio De Vido, sin el conocimiento de la Mesa de Enlace, posiblemente ahora ocurra algo similar que le permita conocer alguno de los movimientos internos en el Gobierno.
Retenciones y recaudación fiscal.

La estimación de la ley de Presupuesto Nacional de recaudación para el corriente año 2009 era de $ 315.000 millones, y si observamos que al 31/07/2009 se recaudaron $172.755 millones, esto refleja claramente que no se va a alcanzar esa meta.Ello se debe a que el PBI, como afirmó el actual Ministro de Economía, Amado Boudou, crecerá este año en 0,5% (Un PBI final de casi U$s 330.000 Millones), por lo que los principales impuestos internos (IVA, Ganancia, Débito y Crédito bancario) implicarán una recaudación menor a la prevista.

Si a eso le sumamos que las exportaciones caerán más de U$s 10.000 millones con respecto al año 2008 (cuando se exportó por un total de U$s 70.021 millones) este año sería menos de U$s 60.000 millones, lo que implica un menor derecho de exportación o retenciones, es decir el gravamen a las exportaciones.

Por ende, en este contexto proponer una baja en las retenciones, como propone la Mesa de Enlace, de reducir a 0 las retenciones al trigo, maíz y a la semilla de girasol, y reducir en 10 puntos las retenciones a la soja y a los pellets y aceites de soja y girasol significa para lo que resta del corriente año 2009 una merma en la recaudación de $2.800 millones, y si esto se aplicara en todo el año 2010 significaría unos $ 10.500 millones.Cualquier proyecto de modificación presupuestaria debe pasar por el Congreso de la Nación y llevaría su tiempo para el tratamiento y aprobación.

En conclusión, las reducciones de impuestos que se terminen aplicando deberán ser acompañadas de una reducción del gasto, lo que no es sencillo de realizar en un presupuesto que va a ser levemente superavitario primariamente y que entra en déficit cuando debe enfrentar el pago de los servicios de la deuda externa.

Por qué deben ser móviles.

El economista Osvaldo Barsky explica las complicaciones de transformarlas en fijas. “El porcentaje debería ser fluctuante porque depende del precio internacional de la soja y de las variables en los costos de los insumos. Hablar de retenciones fijas cuando el precio de la soja bajó un 17 por ciento en lo que va del año y en julio subió un 10% no tiene sentido, porque es muy difícil saber el precio que se va manejar en meses.

La Secretaría de Agricultura cuenta desde el año 1955 con la implementación de una variable a las retenciones que es fluctuante. El tema es que no se consultan cuadros técnicos y se carece de herramientas específicas al momento de confrontar.

Cualquier técnico del Inti le va a decir que las retenciones fijas no sirven. En todo caso, si se quieren gravar rentas extraordinarias deberían aumentar el impuesto a la ganancias, de forma que sea progresivo, porque las retenciones así planteadas terminan siendo regresivas para sectores rurales pequeños y favorece aún más la concentración de la riqueza.”.